La mayoría de los gerentes quieren un equipo de empleados satisfechos y felices; Sin embargo, no existe un lugar de trabajo perfecto donde todos estén siempre 100% satisfechos. Cuando las quejas de los empleados llamen su atención, utilícelas como oportunidades para realizar ajustes de gestión y mejoras en la cultura de su empresa. ¿Listo para convertir las quejas de los empleados en cumplidos? ¡Así es cómo!
En lugar de desestimar instantáneamente las quejas de los empleados, es esencial escuchar activamente y asumir cierta responsabilidad como gerente. Cuando los empleados se sienten molestos, agotados o insatisfechos con una situación o conjunto de circunstancias, es su responsabilidad tomar en serio sus preocupaciones y trabajar para encontrar una solución. Al mostrar responsabilidad, les demostrará a sus empleados que los valora como parte de su organización y que se preocupa por solucionar cualquier problema que puedan tener.
Cuando los empleados enfrentan dificultades o circunstancias difíciles en el trabajo, parte de la resolución debe implicar brindarles la orientación y los recursos necesarios. Por ejemplo, si un empleado dice que no tiene el apoyo adecuado para cumplir con sus responsabilidades laborales, puede pedirle a su gerente que le brinde más capacitación o tutoría. Al tomar medidas para abordar específicamente las inquietudes de un empleado, puede encaminarlo hacia una experiencia laboral más satisfactoria.
Incluso una vez que se implementa una solución, es importante hacer un seguimiento con el personal y solicitar sus comentarios al respecto. El hecho de que un problema parezca resuelto no significa que un empleado tenga una sensación de resolución. El seguimiento en forma de reuniones individuales o simples llamadas de verificación le mostrará a su personal que le importan sus opiniones y quiere asegurarse de que estén contentos con el resultado. Si sus empleados aún tienen inquietudes, esta es una oportunidad para reevaluar y hacer cambios de gestión según sea necesario.
Si bien no siempre es fácil revertir la actitud de un empleado, seguir las prácticas anteriores mejorará la confianza y la lealtad de los empleados en su empresa, lo que contribuirá directamente a elevar la moral y mejorar la retención de empleados.